ahora, no pido que regreses !

Nunca se borró de mi retina aquel día que por orgullo te perdí. Pensaba que te olvidaría a los dos segundos, pero siguieron pasando los minutos, las horas, los días, los meses.. y por más que lo intentaba era imposible olvidar su carita, esa famosa frase de ¡esque he triunfao!. La forma de tocar, de besar. Tu olor, tu sabor, tu sonrisa. TÚ. Cada día que pasaba me arrepentía un poco más de haberte dejado escapar, por una estupidez, me arrepentía de lo bien que intenté hacer las cosas y nunca salieron como deberían. Me arrepentí tanto de no haberle dicho lo que sentía en ese momento.
Me quedaría en la eternidad, porque se me hacían eterno los besos que me dabas.. Nunca podré perdonarme el perderte como te perdí y lo de que ahora que ni siquiera nos miremos. Se que nos hemos hecho daño, que ninguno de los dos hemos sido un santo, pero te quise como nadie. Por eso, si algún día te importé por muy poco que sea, ven a mi. Ya no pido que regreses y me beses sin sentido, si han sido 15 días, 15 veces he nacido. 

Me conformo con escuchar tu voz.